El cáncer de mama se sigue asociando a muerte, y este miedo a la enfermedad crea una importante barrera, es por ello por lo que se debe seguir haciendo conciencia que ésta es una enfermedad tratable y más fácilmente “curable” si se detecta a tiempo, por lo que la autoexploración y la educación son vitales, enfatizó Diego Armando Camacho Ramírez, especialista en ginecología del Centro de Investigación y Docencia en Ciencias de la Salud (CIDOCS) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
“En realidad lo que se ha demostrado es que la enfermedad solo se puede diagnosticar de manera oportuna, no se puede prevenir, en ninguna circunstancia el que te de cáncer de mama, hay que hacer las revisiones de manera rutinaria, con tu médico especialista para poder diagnosticar temprano y dar tratamiento de manera oportuna”, destacó.
El médico universitario apuntó que los estudios de detección de cáncer de mama, es decir la mastografía, deben iniciarse en general por todas las mujeres a partir de los 40 años y en el caso de aquellas que tienen antecedentes familiares esto varía de acuerdo a la edad de detección de la enfermedad en su madre o padre, añadiendo que se recomienda que a partir de los 25 años se realicen evaluaciones con ultrasonido también de manera anual.
“El cáncer de mama, como todos los cánceres, en cualquier parte del cuerpo, es una transformación celular que comienza a originar cambios en el sitio y que pueden migrar a otras partes del cuerpo y ocasionar daños importantes. Son cambios celulares que ocasionan un daño de manera inicial en la mama y posteriormente migran a otras partes ocasionando daños que pueden ser fatales para la vida”, mencionó.
Camacho Ramírez fue enfático en señalar que una vez que se detecta el problema se puede abordar de manera significativa, toda vez que existen tratamientos que cuando la enfermedad es de manera temprana salvan la vida, que van desde la cirugía como tal hasta tratamientos sistémicos (quimioterapia, radioterapia, inmunoterapia), por ello el llamado a las mujeres a que se realicen las revisiones de manera rutinaria.
“La autoexploración como tal puede jugar un papel, un arma de doble filo, yo siempre lo he comentado cuando una paciente se toca o se revisa, la posibilidad que se diagnostique una enfermedad en etapa temprana es poca, porque no tiene la experiencia, ni la capacidad y eso le puede generar una falsa expectativa de bienestar y no acudir a sus revisiones, no me toco nada, no voy, y el otro tema es tocarse algo que en ese momento no representa ningún riesgo puede generar un poco mas de angustia, de la que en realidad es, entonces lo ideal es acudir con tu médico especialista”, concluyó.